LOS PLANETAS ENANOS AYUDAN A COMPRENDER EL SISTEMA SOLAR. ARROJAN LUCES SOBRE SU NACIMIENTO

Resumen

LA IMPORTANCIA DEL HALLAZGO DE NUEVOS PLANETAS ENANOS EN NUESTRO SISTEMA SOLAR, COMO 2015 RR245, DESCUBIERTO RECIENTEMENTE, RADICA EN QUE SE TRA­TA DE OBJETOS PRIMIGENIOS QUE, AL ESTUDIARSE, ARROJAN INFORMACIÓN ACERCA DEL NACIMIENTO DEL PROPIO SISTEMA PLANETARIO. “SI ENTENDEMOS EL NUESTRO, PODREMOS DESCRIBIR MUCHOS OTROS HASTA LOS CONFINES DEL UNIVERSO, SUPONIENDO RAZONABLEMENTE QUE LA FÍSICA QUE CONOCEMOS EN LAS CERCANÍAS ES LA MISMA EN TODO EL FIRMAMENTO”, CONSI­DERÓ BÁRBARA PICHARDO, INVESTIGADORA DEL INSTITUTO DE ASTRONOMÍA. AUNQUE PAREZCA CONTRADICTORIO, SE SABE AÚN POCO DE NUESTRO SISTEMA SOLAR EXTERNO Y MUCHO DE CUÁSARES A MILES DE MILLONES DE AÑOS LUZ DE DISTANCIA; LA RAZÓN ES SENCILLA: LA TECNOLOGÍA DISPONIBLE NO ESTÁ LO SUFICIENTE­MENTE AVANZADA PARA OBSERVAR OBJETOS QUE NO BRILLAN. “VEMOS LOS CUÁSARES PORQUE SON SÚPER BRILLANTES, Y AÚN EN LOS CONFINES DEL UNIVERSO RESPLANDECEN SALVAJEMENTE”. LOS QUE SON DE HIELO Y NO BRILLAN –COMO LOS QUE FORMAN EL CINTURÓN DE KUIPER, UBI­CADO MÁS ALLÁ DE LA ÓRBITA DE NEPTUNO– SE PUEDEN OBSERVAR PRINCIPALMENTE PORQUE REFLEJAN LA LUZ DEL SOL. DADO QUE ESTOS OB­JETOS SON PEQUEÑOS Y OPACOS (ES DECIR, CON ALBEDOS MUY BAJOS), SU DESCUBRIMIENTO TOMA LARGAS ESCALAS DE TIEMPO, COMO OCURRIÓ CON PLUTÓN (REPORTADO EN 1930) Y OTROS PLANETAS ENANOS HASTA AHORA, COMO 2015 RR245, REFIRIÓ LA EXPERTA.