SISMICIDAD Y ZONAS DE SUBDUCCIÓN EN EL PACÍFICO. EVIDENCIAS GEOLÓGICAS

Resumen

LA TARDE DEL 11 DE MARZO DE 2011 SE ROMPIÓ LA COTIDIANEIDAD DEL PUEBLO DE TOHOKU, JAPÓN. EL DESCONCIERTO VENÍA DEL SUBSUE­LO Y EL MAR: UN INESPERADO TERREMOTO DE NUEVE GRADOS SE REGISTRÓ EN EL ARCHIPIÉ­LAGO COMO POR UNA GRIETA Y DESPUÉS VINO LA INVASIÓN MARINA. EL DESASTRE FUE EN TIERRA, AGUA Y AIRE CON FUGA DE RADIACTIVIDAD. “ESE FENÓMENO NATURAL FUE UN PARTEAGUAS EN EL CONO­CIMIENTO SÍSMICO Y HUBO UN CAMBIO DE PARADIGMA POR SU INESPERADA MAGNITUD”, PLANTEÓ MARÍA TERESA RAMÍREZ HERRERA, DEL INSTITUTO DE GEOGRAFÍA. CON TODO EL DESARROLLO CIENTÍFICO DE VANGUARDIA, EL MONITOREO CONSTANTE Y LOS SISTEMAS DE INSTRUMENTACIÓN AVANZADOS, JAPÓN AGUARDABA SÓLO UNO DE MAGNITUD 7.5 EN LA ESCALA DE MOMENTO SÍSMICO, EXPLICÓ LA INVESTIGADORA UNIVERSITARIA. SIN EMBARGO, HUBO LAGUNAS EN EL CO­NOCIMIENTO AL NO CONSIDERAR EVIDENCIAS GEOLÓGICAS DE EVENTOS ANTERIORES AL MODE­LAR UNA ESTRATEGIA DE PREVENCIÓN, AUNQUE ESE PAÍS CUENTA CON REGISTROS HISTÓRICOS DE TEMBLORES, COMO EL OCURRIDO EN EL AÑO 869 A.D; PERO NO ESPERABAN UN TERREMOTO DE MAGNITUD NUEVE. “LO QUE APRENDIMOS CON ESTE SUCESO EN JAPÓN ES QUE NO HAY UNA ZONA DE SUBDUCCIÓN QUE PODAMOS EXCLUIR DE EXPERIMENTAR UN MEGASISMO. SUBRAYO LO ANTERIOR PORQUE EN LA ZONA DE SUBDUCCIÓN MEXICANA SE HA AFIRMADO QUE NO PUEDE OCURRIR UNO ASÍ. LO MISMO SE DECÍA PARA INDONESIA Y JAPÓN, PERO SUCEDIÓ.” SE PENSABA QUE LAS MEGAFALLAS (COMO LAS DE JAPÓN Y MÉXICO) NO SE MUEVEN COM­PLETAMENTE AL MISMO TIEMPO, PORQUE HAY UNOS SEGMENTOS QUE ESTÁN ATORADOS Y SON LOS QUE ACUMULAN ENERGÍA; PERO HAY OTROS QUE LO HACEN LENTAMENTE Y LIBERAN ENERGÍA. EN EL CASO DE TOHOKU SE MOVIÓ TODA LA FALLA, TANTO LA ZONA QUE ESTABA ATORADA COMO LA QUE LO HACÍA POCO A POCO Y ESO FUE LO QUE GENERÓ EL SISMO DE NUEVE GRADOS. FUE UN DESPLAZAMIENTO DE 80 METROS (MO­VIMIENTO RELATIVO ENTRE LAS DOS PLACAS), QUE DEFORMÓ EL GEOIDE (FORMA DE LA TIERRA); ÉSTE ES UN NUEVO CONOCIMIENTO, DIJO. EN LA COSTA DEL PACÍFICO MEXICANO (DESDE NAYARIT Y JALISCO HASTA CHIAPAS) ESTAMOS EN LA ZONA DE UNA MEGAFALLA EN UN LÍMITE DE PLACAS SIMILAR AL DE JAPÓN; ES UN ÁREA DE SUBDUCCIÓN QUE TIENE UNA EXTENSIÓN APRO­XIMADA DE MIL KILÓMETROS Y SI SE MOVIERA COMO UN SOLO BLOQUE AL MISMO TIEMPO, SE PRODUCIRÍA UN MEGASISMO QUE POTENCIAL­MENTE PODRÍA ALCANZAR MAGNITUD NUEVE. POR ELLO, INSISTIÓ EN QUE NO HAY ZONA DE SUBDUCCIÓN QUE ESTÉ A SALVO DE UN MEGA­SISMO, QUE ADEMÁS PRODUCIRÍA UN TSUNAMI EN LUGARES COMO ZIHUATANEJO, ACAPULCO, PUERTO VALLARTA Y PUERTO ESCONDIDO, POR MENCIONAR ALGUNOS. NO HAY LA PREDICCIÓN, PERO CON EL CONOCIMIENTO GEOLÓGICO SE SABE QUÉ PRO­BABILIDAD DE REPETICIÓN HAY EN CIERTO PERIODO DE TIEMPO. LOS EVENTOS TAN GRAN­DES NO SON TAN FRECUENTES, PERO DEBEMOS CREAR ALERTAS Y EDUCAR A LA POBLACIÓN, ESTABLECER LEYES DE CONSTRUCCIÓN CON RIGOR Y DETERMINAR SITIOS DONDE PUEDA REFUGIARSE LA GENTE, FINALIZÓ.